PARA LOS CASTRO, EL VALOR DE OSCAR HAZA ES DE USO

(5-20-11-5:00PM)


Por Andrés Pascual


A Oscar Haza no tuvo que comprarlo la tiranía, se le ofreció por voluntad propia desde que flirteó con cuanto agente de la inteligencia castrista de la embajada en cubana ante la ONU, en Nueva York hubo, sufragándoles gastos para cubrir caprichos que iban desde zapatos para el que le gustaran en enfermiza compulsión, hasta videotecas sobre los Yanquis de Nueva York, para quienes este club era parte del fanatismo enfermizo que se le prohíbe disfrutar al pueblo de la Isla.

Pero el caso cubano vende más que Lady Gaga, porque no pasa de moda y son 52 años en el supertope. Entonces el dominicano decidió abandonar el norte y plantar su cuartel general de izquierdista solapado, de admirador del delincuente comunista Francisco Caamaño Deñó, de antiamericano y oportunista encubierto, en Miami.

A fin de cuentas, nadie sabe si llegó aquí para convertirse en la primera figura del show prime time de la ciudad, con el dinero que esto trae como resultado, o fue enviado quién sabe por quiénes, a timar a gente que han hecho de su patria, de su recuerdo y de su afán por liberarla un evangelio.

Para el Versalles, su carta de presentación fue a base de un “seguidor del beisbol” en Dominicana, capaz de poder hablar sobre íconos para el cubano como sus propios peloteros, tal Mike de la Hoz, de quien es amigo, o de Buck Canel, el legendario narrador al que dice que pudo conocer por relaciones familiares, más una “bola” que lo relacionaba ancestralmente con Cuba y con el régimen de Batista, además de la sempiterna compañía de Marcos A. Ramos.

¿Qué otra cosa necesitaba para ganarse la atención y la confianza del público más fácilmente timable de América? Porque nosotros tenemos un problema con la avidez por saberlo todo de Cuba y en contra de la tiranía al no disponer de ningún mecanismo para identificar al enemigo, precisamente, por las reglas de la democracia. Después, cuando logramos detectarlo, ya el daño está hecho…

Oscar Haza tuvo como productor a un elemento castrista tan preciado que no solo él se desvivió en elogios hacia el tipo; sino que, alguna vez, trajo al programa a Bernardo Benes para que lo hiciera, a través de una entrevista sobre el asunto del Diálogo de 1978 y el Mariel.

Hace años, cuando hacía un programa matutino con Agustín Acosta en una emisora una vez patriótica, hoy Circuito Univisión Radio, en el que tenía por norma iniciar la transmisión con una exagerada alabanza de la corbata del día del cubano, cometió un error garrafal de apreciación, digno de un colegial de 1era. Enseñanza, al emplear media hora despotricando contra George W. Bush y la propuesta presupuestaria de defensa del momento, entonces tuvo que interrumpir la diatriba contra Estados Unidos y el Partido Republicano, porque “un avión ha impactado contra una de las torres gemelas”, luego del conocido, “seguiremos la noticia”, casi de inmediato, se incrustó la segunda aeronave en la otra…Era el 11 de septiembre del 2001, recuerdo ese programa como si fuera hoy, y a Agustín replicar con “¡Hum!”.

Después, Haza se disparó en niveles de popularidad imprevisibles con su show televisivo oportunista, de falso sentido objetivo y de menos buena intención hacia lo cubano patriótico.

Yo no creo, nunca lo he creído, que la tiranía quisiera “tumbar” ni a Oscar Haza ni a María Elvira Salazar, porque, en realidad, no surten efecto dentro del pueblo cubano capaz de generar la rebelión necesaria y solo tienen valor para algunos disidentes que, en Cuba, alimentan su ego de protagonistas sabiéndose escuchados en el programa por teléfono, o aquí cuando asisten a esos circos mediáticos. A fin de cuentas, si quisieran, lo hubieran hecho. Definitivamente, esa gente no elimina lo que les conviene, lo que les beneficia…

El último golpe bajo del dominicano es sobre un video que cuestiona la integridad, la moral y los principios de verdaderos luchadores por la libertad de Cuba como Aldo Rosado, Director de Nuevo Acción y del ex preso político plantado y ex embajador de este país, Armando Valladares, que se puede leer detalladamente en la página digital del sitio.

Es por cuestión de intereses de entretenimiento, de opción única de horario por el desconocimiento del inglés, muchas veces, y porque las cadenas grandes como Univisión y Telemundo son tan agresivas contra la moral ciudadana y contra la libertad de Cuba como los canales de intención pseudocubanos de pequeño mercado de Miami, que se mantiene el rating de Oscar Haza en niveles competitivos…

El pueblo cubano exiliado, oyó bien, el exiliado, debería buscar otra alternativa al show de las 8 p.m. que, nadie lo dude, es una inyección encubierta de desprestigio contra los valores sagrados del destierro que lucha por recuperar la patria robada, mancillada y reprimida.

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