La libertad de Cuba: ¿Diálogo, violencia? *** Por Zoé Valdés

La libertad de Cuba: ¿Diálogo, violencia?



Hoy leí un artículo en El País de la bloguera Yoani Sánchez donde más o menos dice que después del crímen cometido con Oswaldo Payá Sardiñas y de tantas amenazas de muertes a varios de ellos, cita los nombres de disidentes históricos y nombres de la bichidisidencia mezclándolos a todos por igual, cosa que antes no hacía, antes ignoraba olímpicamente a Martha Beatriz Roque y al mismo Payá, y cuando uno intentaba mencionarlos como opositores con programas políticos reales, ellos, los blogueros respondían muy orondos que ahora lo que servía para derrocar a la tiranía eran los blogs, el twitteo, y demás; pero pártanme el título del artículo La oposición cubana se debate entre derrocar el régimen o el diálogo, o sea la disidencia se debate entre el diálogo con los verdugos, con los tiranos, o derrocarlos. ¿Pero qué clase de disidencia es ésa que prefiere dialogar con los que disiente antes que derrocarlos, después de más de 53 años? Y añade que la disidencia cubana siempre ha sido pacífica.

Bueno, tiene razón, los únicos violentos siempre han sido los Castro, los únicos asesinos han sido ellos, los represores, y los terroristas son los Castro. O sea, con los que ella plantea que la disidencia quiere dialogar. Es la razón por la que no entiendo cómo se puede argumentar que el diálogo es lo que quiere la disidencia pacífica, ¿el diálogo pacifista con los personajeros y representantes de la violencia en Cuba? ¿Cuáles son los argumentos para que el único camino al que ellos aspiren sea el pacifismo con gente que desprecia ese pacifismo hasta quitarle la vida a sus promulgadores? ¿Motivados por qué? ¿Por el Premio Nobel, o por la libertad, la justicia y la democracia de Cuba? El Premio Nobel hoy por hoy los únicos que se lo merecen son el MCL, Ofelia Acevedo y Rosa María Payá, y Oscar Elías Biscet. Punto pelota. Nadie más. Y ellos han expresado su enorme deseo, por encima de todo lo demás, de que Cuba sea libre, democrática, y justa.

Pero esta señora escribe una retahila de mentiras e intenta virar la tortilla incluyendo en esa lista de nombres a Elizardo Sánchez y a Antonio Rodiles, el dandy de los cambios. Añade que la DSE o Seguridad del Estado siempre ha tratado de denigrar a todos ellos tachándolos de segurosos, y demás. Bien, no me consta que Rodiles sea seguro, pero no debieran ignorar ella , ni él, que por Facebook corren unos correos donde se dice que este señor vivió durante años en Estados Unidos, cosa que él oculta, y que en su casa estuvo alquilado junto a una amante cubana el abogado de Los Cinco espías de Castro, entre otras lindezas. Si esas informaciones las sacó la DSE para joderlo, bueno, eso yo no lo sé, pero lo que sé y lo que me importa es que nadie ha impedido que varias manifestaciones transcurran en su casa sin ningún tipo de problemas ni detenciones de ninguno de sus organizadores; mientras que a Martha Beatriz Roque como a Vladimiro Roque no les permiten la más mínima reunión en sus casas. Y mientras Sonia Garro Alfonso, Ramón A. Muñoz y Niurka Luque siguen encarcelados en Manto Negro y el Combinado del Este, hechos a los que nunca o muy poco (no recuerdo ninguna ocasión) ella se ha referido.

En cuanto a Elizardo Sánchez, en toda la red se han visto fotos y videos de este señor aceptando una medalla del MININT por sus servicios prestados, bajo el nombre de agente Juana. No creo que eso lo haya inventado nadie para fastidiar, cuanto y más él no ha protestado, ni ha dado explicaciones, que yo sepa. A cualquiera nos pueden haber cogido una foto, una basura, un desliz, pero óigame, ¿con una condecoración del MININT in situ? Vaya, eso sí que no creo yo que sea inventado.

Pero tal pareciera que el detonante para colocar a unos en la palestra, lo sospecho como mismo sospechaba Payá de que la iglesia estaba conspirando con el gobierno en su contra poniéndole encima al MCL otro grupo disidente que le hiciera sombra y aplastara al suyo, ha sido la propia muerte del líder del MCL. Uno menos en el camino de muchos. Y no precisamente en “el camino del pueblo”.

Tan es así que resulta que hasta Reinaldo Escobar ha declarado en un artículo refiriéndose al Proyecto Heredia, como el “la obra pendiente de Oswaldo Payá”. Un proyecto que tuvo su génesis en el Proyecto Varela, así que de ‘pendiente’ nada de nada. Y claro apenas se menciona El camino del pueblo, otro proyecto que no firmé porque no me da la gana de poner mi firma al lado de la de unos cuantos trepadores que hacen caja a diario con el dolor de Cuba. Así que no sé con qué intención se afirma que el Proyecto Heredia estuvo o quedó pendiente.

Lo que sí es cierto es que ahora ya tienen el camino libre para hablar de diálogo con la dictadura, y lo proponen como si malanga. Con la dictadura que al mismo tiempo le plantea un diálogo a los Estados Unidos. Vamos, es que todo es tan evidente que da asco. Porque, ¿cómo es posible que los Estados Unidos no quieran dialogar con los castristas, si hasta los disidentes quieren dialogar con ellos? ¡Y eso tras la muerte de su opositor más importante!

En lugar de exigirle a esa misma dictadura que aclare las circunstancias en las que murió este hombre, así como el otro activista, el joven Harold Cepero. Y pedir además que sean liberados los dos extranjeros que han quedado retenidos en Cuba, como rehenes de un crimen que no ha sido aclarado.

Con el nombre y el prestigio que le hemos ayudado a ganar los exiliados a Yoani Sánchez era para que ella escribiera en ese sentido, en vez de ponerle una mesa de diálogo y de negociaciones a la tiranía que los asesinó.

¿Y si mañana el pueblo cubano, como el pueblo sirio, decide por el camino de la violencia? ¿De qué parte se pondrá la señora Sánchez, de la del pueblo o de la del régimen que los reprimiría?

Es que hay ser ciego o comebolas. Y yo no lo soy.

Zoé Valdés.


Foto tomada del blog Baracutey Cubano: Elizardo Sánchez siendo condecorado por el MININT



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