MORAL CONYUGAL EN CUBA

MORAL CONYUGAL EN CUBA


Posted June 23rd, 2011 by Reinaldo Escobar


PAREJA CUBANA TRASLADANDOSE CON UN HIJO PEQUEÑO (2011)



En las democracias representativas se legisla muy poco a favor de la familia tradicional. En primer lugar porque la familia es una institución anterior al orden social y a la formación del Estado que conserva de forma natural una fuerza propia no muy favorable al sometimiento individual que los políticos esperan del ciudadano. En el mundo occidental las instituciones posteriores a la institución familiar siempre han trabajado para disminuir su poder e influencia social. Los partidos políticos defienden grupos y clases sociales enteras pero nunca a la familia, y ni siquiera la Iglesia ha representado bien a dicha institución que solo cuenta con sus lealtades internas para sobrevivir. La Iglesia y la economía de mercado prefieren la moral individualista al colectivismo familiar, y eso por no hablar del totalitarismo comunista que define a la familia como una institución reaccionaria opuesta a la coección social y al colectivismo marxista.

En la antigüedad es curioso como un ejercito tan bárbaro como el Asirio fue incapaz de disolver los lazos familiares de los hebreos sometidos, a los cuales trasladó más allá de las fronteras de su imperio sin separar a padres de hijos a esposos, ni a hermanos. La destrucción de la familia es obra de gente malvada que no les basta con cobrar impuestos y uniformar a jóvenes, sino que buscan la esclavitud total enmascarada con el individualismo y otros credos del éxito personal.

Programas para "ayudar" a la comunidad lesbiana, gay y bisexual dentro de Cuba recibirían $300,000 de parte del USAid pero ni un solo dólar sera entregado a programas que busquen la consolidación del matrimonio ni que ofrezcan cursos de moral conyugal, en un país tan necesitado de familias fuertes. Los que desean una Cuba libre y soberana no serán los que desprecian la familia y la moral conyugal tan necesaria a una sociedad civil sana, y el liberalismo extremo solo favorecerá el orden social de barracón que tanto gusta a los enemigos de los pueblos libres.

Banqueros internacionales se ríen todos los días de políticos de izquierda y de derechas en todas partes. La orgullosa Europa tiembla delante del FMI, y un ejercito de universitarios hambrientos recorre las calles y plazas reclamando lo que nadie les dará, un empleo decente. Vivimos en un mundo hipócrita que habla de democracia, pero que obedece a la usura internacional, que cree en el pluripartidismo pero que siempre practica el bipartidismo, que denuncia al fascismo pero disimula al comunismo, que endeuda a muchas generaciones en nombre de la educación y de la salud pública, en fin un mundo socialista en gastos, capitalista en empleos y bárbaro en moral, y donde la familia, la patria, y Dios son temas tabú. Los cubanos como parte de este mundo absurdo debemos concentrarnos en nuestros asuntos nacionales, desconfiar siempre del dinero fácil y no creer que nadie desde afuera nos va a salvar si nosotros mismos no tomamos medidas por salvarnos, sin familia no hay sociedad, y sin moral conyugal no hay futuro, el resto es servidumbre y decadencia moral de los pueblos que no toman en serio su soberanía.