RICARDO GALBAN GRAVE POR HUELGA DE HAMBRE

El Directorio Democrático denunció este martes en Miami que el prisionero político Ricardo Galbán Casals, en huelga de hambre desde el 8 de marzo, presenta un estado deteriorado de salud por las torturas a que le ha sometido el régimen castrista, informó EFE.

El estado de salud de Galbán, de 41 años, que padece de asma crónica y enfisema pulmonar, se agravó este domingo tras ser aislado en una celda de castigo de la prisión provincial de Guantánamo y permanecer cinco días sin beber agua, según esta organización.

"Denunciamos el uso sistemático en las cárceles cubanas de la tortura mediante la negación del agua a un ser humano para romperlo y quebrantarlo", dijo a EFE Janisset Rivero, directora del Directorio Democrático.

Rivero advirtió del "diseño represivo" carcelario que, en su opinión, ya utilizó el régimen contra el preso de conciencia Orlando Zapata Tamayo, quien murió a finales de febrero pasado como consecuencia de una huelga de hambre de 86 días.

La activista expresó su preocupación por que los medios internacionales comiencen a hacerse eco cuando ya el proceso de deterioro de Galbán sea irreversible y éste muera, y recriminó a la prensa de otros países presente en La Habana y a Amnistía Internacional que no dieran prioridad a Zapata hasta que murió.

"No queremos que la situación de Galbán pase inadvertida, como pasó con Zapata", subrayó.

En un audio difundido por el grupo del exilio, la madre de Galbán, Haydee, acusa a las autoridades cubanas de negarle el agua a su hijo durante cinco días y señala como responsable a Rubén Fernández, oficial jefe de la seguridad de la prisión.

La madre del opositor advirtió de que los "carceleros" se preparan ahora para manipular el caso, como ocurrió "después del asesinato de Zapata, cuando el régimen produjo grabaciones e informaciones manipuladas para negar que habían causado su muerte", destacó la organización.

El opositor del Movimiento Jóvenes por la Democracia se declaró en huelga de hambre, explicó Rivero, después de que las autoridades se negaran a responder a su "petición de atención médica y licencia extrapenal" para poder recibir tratamiento fuera de la cárcel.