Gracia Cubana. Cuando el Diablo estableció sus oficinas en Cuba

Lo vi en Payo Libre y lo copié porque me gustó y además me reí

Cuando El Diablo estableció sus oficinas en Cuba, comenzó a desarrollar por todo el país, una mezcla de humor negro con colora’o, que, sin embargo, la gente no siempre disfruta por las circunstancias dramáticas en que ocurren.

De esa forma, lo mismo hace que el parlamento discuta lo injustas que son las leyes en Estados Unidos; que logra que el jefe detestado declare públicamente que los frijoles son problema de seguridad nacional.

He visto gente en la calle, hombres y mujeres en ropa interior, y encima, todo esto ocurre con la más asombrosa seriedad. Anuncios en la radio llamando a fornicar porque el mundo se acaba en el 2012. Y niños haciendo contorsiones y gestos obscenos en sus escuelas al compás de canciones extrañas que describen actos sexuales, mientras en la misma escuela y a través de los mismos maestros que promueven esas canciones bobas, se habla de rescatar valores morales perdidos.

Lo otro que hace diariamente El Diablo con la ayuda de su gente en el gobierno -porque la verdad es que solo no podría-, son los hechos mágicos y sobrenaturales que sin embargo no trascienden, precisamente gracias al control de la prensa y la agresividad de la Seguridad del Detestado.

En televisión aparece una señora, supuestamente nutrióloga, que con voz ridícula, tal vez sin intención, presenta platos de fácil elaboración, como por ejemplo el boniato crudo rayado con guarnición de flor de amapola. La señora asegura a toda la nación que es un plato delicioso, nutritivo y muy agradable al paladar.

Nada de lo que te estoy contando es jodedera, o por lo menos, no mía.

No sé si conoces que aquí hay limosinas, se alquilan y todo. En los años 90 cortaban dos Ladas, los empataban luego y los llamaban limosina. Aquello fue un éxito de la ingeniera cubana que todavía hoy están en funcionamiento. Todo el mundo los conoce y nadie se ríe, es algo normal.

Usted llega a la empresa de trasporte en San Germán y dice:

Yo quiero alquilar la limosina.

–¿Cuántos pasajeros son? –alguien le responde.

–Somos 17. Cinco personas y doce gallos. Vamos a la valla de Puente Negro.

Entonces la encargada reporta “17 pasajeros” porque el auto no puede circular sin aprovechar toda su capacidad de carga. Teóricamente en ese engendro mecánico no caben más de ocho personas, pero eso es teóricamente. Algo similar ocurre con otra remodelación hecha a los taxi Lada; a estos les quitaron el maletero y ahora en ellos caben tres pasajeros más.

Con las ambulancias ocurre otro tanto. Hasta que no esté llena no se mueve. He visto gente en la calle localizando donde pueda haber un herido grave o algo parecido para completar un viaje de la ambulancia y salvar de esa forma a su padre que espera infartado en el puesto médico de San Germán porque aquí no hay hospital.

En una ocasión se apareció Alberto boca ‘e lija con dos tipos con la cabeza rajá, pa’ completar un viaje porque la hija se la remitían para el pediátrico con un síndrome respiratorio agudo. No sé qué hizo boca ‘e lija, pero yo hubiese hecho lo mismo.

En Cuba el carnaval dura todo el año, hay mucha gente vestida de payaso con ropas traídas de Ecuador, y aseguran que en ese país un pollo vale lo mismo que aquí; cuatro o cinco dólares. Analiza tú.

Hay muchos magos que lo mismo hacen desaparecer un central, que a ti si te pones a comer mierda. Y de los ilusionistas ni hablar, lo mismo te muestran una superproducción de papa que una escasez nunca vista de alimentos en Estados Unidos.

Como el diablo es jodedor, ahora ha hecho que la gente crea que es normal que los padres le tiren una foto desnuda a su hija de 15 años; y exhiben orgullosos el álbum y todo. Y luego te dicen.

–El fotógrafo es un artista, fíjate en eso que se ve entre las piernas de la niña. ¡Parece otra cosa!

A Satanás le encantan las multitudes, pues estas son aprovechadas por carteristas, enfermos mentales y jodedores que fácilmente te sacan la cartera y te ponen un condón. Después de eso tú mejer no cree que te robaron.

Como el tema es muy grande, para terminar te digo que te fijes en la costumbre de ponerle nombre a los años, es algo ridículo pero curioso, hay que dedicarle un libro al análisis de los nombres de cada uno de los años, pero para el pueblo cada año es el del consumismo; ya sabes, con su mismo pantalón, con su misma camisa, etcétera.

Y ten en cuenta que generalmente los demonios son confundidos con oficiales de la Seguridad del Detestado. No sé por qué será, pero debe ser porque el jefe es el mismo, mi señor Satanás.

Jajajajaj