¿GUERRA CIVIL EN CUBA?

Posted June 8th, 2011 by Reinaldo Escobar



La sociedad cubana es cada vez más violenta. Numerosos incidentes sangrientos en todo el país han disparado la señal de alarma y la policía recibe cursos especiales de como manejar situaciones de masacres en espacios públicos. Una juventud ociosa, desorientada y criada en las calles ya empieza a usar armas blancas ante cualquier conflicto, señal de que la revolución en el orden social no tuvo éxito en crear nuevos valores morales que sustituyeran los antiguos. Hace unos días Esquivel (36 años) tropezó en un bar de Camagüey y derribó dos cervezas de un "guapo" que estaba en el lugar, y sin mediar palabras el individuo y sus amigos se abalanzaron sobre el, y cuatro puñaladas lo derribaron por el suelo en medio de un charco de sangre. Esquivel ahora en coma se debate entre la vida y la muerte en el hospital provincial . El pasado domingo dos encapuchados a pleno día en el casino campestre de la ciudad de Camagüey asaltaron con armas de fuego un puesto de refrescos y licores (estatal) y se llevaron 1900 cuc del lugar. Las cárceles están llenas de jóvenes que ante cualquier conflicto por pequeño que sea están dispuestos a cortar o apuñalar a su prójimo sin escrúpulos de ningún tipo.

La sustitución de valores morales en Cuba se quedó a medias y el "nuevo hombre" fracasó como proyecto político dejándole a la sociedad civil una carga de violencia y anarquía, pero vayamos por partes; la revolución cubana desde el principio desmanteló las viejas instituciones que fueron sustituidas por otras que acompañadas del ambiente de cambio atemorizaron lo suficiente como para provocar el fenómeno comúnmente llamada "lavado de cerebro". Desde el paredón de fusilamiento, los actos de repudio, y la presión de grupo en escuelas y centros laborales toda la agenda era aniquilar los fundamentos morales del viejo orden, y en esto tuvieron éxito, pero fue a la hora de inculcar los nuevos valores donde fallaron, porque para crear una nueva mentalidad hace falta la aprobación del corazón, es decir una conversión emocional, que al no producirse se crea un vacío ocupado por los contravalores del crimen y la anarquía. Las nuevas generaciones no aman los viejos valores, no se identifican con los disidentes ni con el exilio tradicional, pero tampoco aman al partido comunista, ni a los lideres de la revolución.

Algunos exiliados desean de todo corazón un levantamiento popular en Cuba contra el gobierno de la isla. Las rebeliones civiles en el mundo árabe y el papel de las redes sociales han levantado ilusiones al respecto, pero Cuba tiene otra cultura donde los ideales ocupan un segundo lugar y donde los lazos de familia no son tan fuertes como en aquellas regiones. Las rebeliones de la sociedad civil no son mas que rebeliones de grupos familiares contra el Estado en las sociedades islámicas.

Pretender el surgimiento de una república virtuosa donde la dignidad del hombre este protegida por las leyes es todo un reto en un país donde la familia perdió toda su capacidad de educar, y el Estado que asumió la tarea solo favoreció el materialismo marxista; que esta más cerca del hedonismo capitalista de lo que muchos sospechan. El comunismo fracaso en todas partes no por su ineficiencia económica, sino por su incapacidad de crear nuevos valores éticos que guíen a los hombres por el bien moral. La izquierda dice que las sociedades burguesas están llenas de vicios y de un individualismo decadente (lo cual no es una mentira), pero el marxismo empeora las cosas eliminando a los grupos naturales que sostienen a la sociedad civil (gremios, familias, sindicatos, comunidades religiosas, etc). Asi que para los cubanos que deseamos el progreso de Cuba esta muy claro que solo con mas derechos civiles podemos potenciar un verdadero desarrollo del país, y esos derechos, que ya estuvieron escritos en la constitución del cuarenta, pero que no se hicieron realidad mas allá del papel deben ser plasmados de nuevo, pero acompañados de una avanzada moral que forme ciudadanos virtuosos, que son la única garantía de una república libre de verdad.