LO BUENO Y LA MALO DEL INTERCAMBIO CULTURAL

Posted July 25th, 2011 by Reinaldo Escobar


Yadira Escobar protestando públicamente contra el intercambio en una sola dirección

Aislar, bloquear y dividir a la familia cubana son parte de una agenda antinacional patrocinada por antiguos grupos de poder que desde el exilio no esperan otra solución para el problema cubano que la de ganar ellos, y no importa la opinión de las mayorías, porque este grupo elitista esta acostumbrado desde el principio a conspirar en círculos cerrados donde no entra el clamor popular.

La administración de Obama ha facilitado el intercambio cultural entre el pueblo cubano y el estadounidense, y finalmente ese intercambio tocó a la comunidad cubana residente en el sur de la Florida. Los hombres del poder no habían pensado en favorecer un intercambio cultural entre cubanos, pero cada vez más vinieron los artistas cubanos al condado Dade y se produjo un rechazo entre los exiliados que percibieron estas "visitas culturales" como una avanzada del régimen cubano para debilitar viejas posiciones de oposición al gobierno socialista de Cuba.

Durante muchos años Silvio Rodríguez y Pablo Milanés cantaron a la revolución, y la revolución les apoyo a ellos, eran artistas totalmente patrocinados. Hoy pueden cantar en Miami porque muchas cosas han cambiado. Ni Cuba es igual, ni Miami tampoco. Una nueva generación impone costumbres, pero no tiene quien los represente. Las viejas representaciones del mundo político la llevaban a cabo los marxistas y los amantes del capitalismo. Hoy vivimos en un mundo en crisis. El marxismo totalitario esta desprestigiado, y el "estado del bienestar" o capitalismo de las sociedades opulentas se quedó sin créditos, todos los valores pasados están en crisis y esta nueva generación de cubanos quiere ser feliz en un mundo difícil, parecen existencialistas sin ideales, pero en realidad son los herederos de las ideologías fallidas, y están hartos de discursos políticos que no tienen relación con sus realidades.

La realidad cubana es la de un pueblo sin gobierno, ni partidos, ni disidencia que los represente. Un pueblo profundamente dividido por viejas querellas que no solo esta cansado de los viejos políticos, sino que quiere una vida mejor, y eso no se logra con bloqueos de ningún tipo. Ser nacionalista es un principio opuesto a las divisiones artificiales. La nación necesita encontrarse consigo misma; dialogar, intercambiar, contactar por todas las vías posibles para que se produzca un cambio natural, y no impuesto por fuerzas políticas antinaturales.

Pablo Milanés debe cantar en Miami hoy más que nunca, para bien de todos, no como nos visitó el grupo musical Los aldeanos; con sus iconos comunistas, y sus ofensas al exilio, sino con respeto. Esta comunidad tiene de todo, aquí viven viejos verdugos, criminales batistianos, ladrones de los 40, pero también decentes familias trabajadoras, cubanos maltratados por el comunismo totalitario, auténticos refugiados políticos, y gente muy dolida. Pablo debe cantar en el corazón del exilio, pero también los artistas exiliados deben llevar su arte al corazón de la Patria. Ya es hora de un intercambio cultural auténtico, en ambas direcciones, que una a la nación.