AMOS Y ESCLAVOS

Posted December 29th, 2009 by Reinaldo Escobar





Cuando los reyes de España dieron instrucciones a los conquistadores, para que respetasen la vida de otros monarcas, en los pueblos que habitaban las américas, demostraban cuan cercano esta el corazón de un amo de su tocayo ( el otro amo), aun cuando este gobierne en el bando contrario. En nuestro agitado planeta numerosos gobiernos, están tan disociados de sus pueblos, que sin temor a exagerar pudieramos describir esa relación como de amos y esclavos. Muy cerca de esos gobiernos están los socialistas de siempre, tratando de impedir la existencia de repúblicas libres, pero también, y sobre todo tratando de participar en las relaciones exteriores de las democracias opulentas, para de esta manera y usando los impuestos del contribuyente tender una mano a todos los gobiernos de izquierda caídos en desgracia, para llevarles de una forma suave hacia un capitalismo sin democracia, que permita la supervivencia de sus elites ya experimentadas en la gobernación de sus poblaciones esclavas, esta solidaridad con esos monarcas totalitarios se manifiesta hoy muy descaradamente en la política exterior de esas democracias opulentas hacia Cuba, política que trata de marginar al exilio tradicional, presentando el problema cubano como un conflicto entre naciones, en vez del real conflicto del régimen con su pueblo.
La mañana en que probablemente desde Cuba, uno de los amos llamó a sus tocayos en los Estados Unidos para informarle, de que tomaran medidas "con los cubanos de Miami" porque en la tarde anunciarían la seria enfermedad del caudillo, el entonces presidente George Walker Bush se presento personalmente en el sur de la Florida para encontrarse con las autoridades policiales y fronterizas y planear todas las respuestas al estallido popular de festividad ( una vez fuese pública la noticia) y quizás tambien al posible retorno masivo sin permisos oficiales, pues como un rebaño nos vieron los amos de ambas orillas.
Una mañana nos levantaremos y descubriremos la mesa servida para nuevos amos, que en la noche y a espaldas del pueblo cubano, cogieron la fruta madura de la patria esclavizada . Esa patria a la cual no renunciaremos porque no nos da la gana, porque es nuestro derecho inalienable, aunque tengamos una nacionalidad turca o polaca. Somos eternamente cubanos con derecho al retorno, y con facultad para gobernarnos a nosotros mismos, en una república propia. Somos hombres dignos y eso lo saben todas las hordas fabianas de la globalización, nuestro nacionalismo nunca muere, porque ya es genético, y en el alma de cada cubano anida un terquedad por la libertad , que nada tiene que ver con la izquierda o la derecha política, sino con nuestra pasión de ser libres. Esa mañana en que nuestros enemigos crean, que establecerán al mismo perro pero con diferente collar, saldremos a la luz como partido organizado del nacionalismo cubano y lucharemos por evitar el traspaso de coronas, no es nuestro destino ser esclavos.

¡Sumate al nacionalismo!